Esta historia es de algo que me pasó en la escuela. Resulta que en la uni hay un profe, al que llamaré Beto, que me encantó desde la primera vez que le vi, es un hombre joven, galán, barba de candado, complexión media, se notaba que iba al gym, buen trasero y bulto, cabello castaño, blanco, alto. Por azares del destino me tocó como profe y pues llegué los primeros días y tomaba sus clases, supuse que no aguantaría, pero necesitaba tomar esa materia, ya que iba atrasado.
Para no salir tan bajo en su materia le pedí ayuda y me dijo que sí, me citó el viernes en la tarde en su cubículo. Asistí y pues él llevaba unos jeans pegaditos y una playera pegada también, lo que notaba su buen cuerpo; me empezó a explicar y sin darnos cuenta se hizo de noche. Yo salí a la parada de mi microbus, pero ya no pasaba y en eso Beto, el profe, pasó en su carro y me preguntó que a donde vivía y que si me podía acercar o algo así, yo acepté subirme a su carro y en eso me dijo que si quería ir a cenar, algo muy soso, pero dije que sí, fuimos y pasamos por un bar gay que está cerca de la taquería a la que fuimos y me dijo que si alguna vez había ido, a lo que respondí que no...
Entonces me dijo:
-A que te atreves a entrar? Te pongo 10 sí entras y si no, te repruebo.
Respondí que sí entraba, que me iba a poner 10 y entramos. De hecho nunca había ido a ese antro, pero me sorprendió el ver el hecho de que ya lo conocían a Beto, muchos lo saludaban y ya se imaginarán que pensé... ahora era cuando.
Nos echamos unos drinks y pues ya era hora de irse, le pedí que me llevara a mi casa pero me dijo: "tengo una mejor idea, vamos a un lugar donde te vas a divertir".
Fuimos a su depa, que es bastante grande, y me dijo que me pusiera cómodo, o si no, me olvidara de mi 10. En eso, se acercó a mi y nos empezamos a besar y empezó el tipico faje. En eso que lo empiezo a desnudar y decubrir que era un chico velludo, como a mi me gusta. Comencé a besar su cuello, bajé poco a poco por su torax sin olvidarme de esas tetillas paraditas, mismas que mordisquee. Luego fuimos a su recámara en donde se acostó y seguí con mi trabajo. Metí mi lengua en su ombligo y empezó a gemir de placer y posteriormente bajé a sus muslos, bajé su boxer para descibrir una verga bastante grandecita y parada, con unos huevos grandes y colgantes.
Empecé a trabajar en los huevos lamiéndolos y luego pasé al tronco para terminar con su cabeza circuncisa y grande. Beto tiene la verga como me gustan, con venas y cabezonas, como un champiñón.
Luego fue su turno de morderme mis tetillas (a mi eso me prende) y me puso boca abajo. Besó toda mi espalda mientras decía: "cómo deseaba tenerte así" y luego me nalgueó, para luego separar mis nalgas y empezar a lamer mi culito. Sentí que veía estrellitas o no se qué, pero me encantó.
De uno de sus cajones sacó lubricante y condones, mismos que aplicó en mi culito y se puso el condón para empezar a meter su tranca, poco a poco, mientras yo me quejaba porque me dolía. Él no hizo caso, y siguió con su trabajo, para convertir ese dolor en algo rico. Luego sacó su verga y me volteó y me puso patitas al hombro y me siguió cogiendo hasta que se vino...
Recostados en su cama me dijo que deseaba estar así conmigo, desde que me conoció, y yo le confesé que me encantaba como macho.
A la mañana siguiente me volvió a coger, pero de eso luego les cuento. Cumplió con su promesa, tuve 10 en su materia y pues hemos seguido viéndonos, ya que somos amigos con derechos, aunque ayer me confesó que quería algo más que amigos, y creo que voy a aceptar su invitación, me encanta el cabrón. Hoy pasaremos nochebuena juntos y espero que sea realmente una noche buena, y espero contarles qué tal me fue...
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